Hello Summer Tan

Ya sea en tu jardín, en la terraza o el balcón, el sol hace sencillamente feliz. Porque la luz solar estimula la producción de serotonina, la hormona del buen humor. Regula la ansiedad, es importante para la salud ósea e influye positivamente en el ciclo de sueño. En resumen, ¡el sol sienta bien! Pero como siempre, se trata de no exagerar, porque un exceso de sol significa puro estrés para nuestro órgano más grande: la piel.

¿Cómo funciona el bronceado?

El bronceado es activado por la melanina, un pigmento que se forma debajo de la piel cuando la radiación ultravioleta llega a las células cutáneas. La luz solar contiene rayos UV-B, UV-A y UV-C. Los rayos UV-B se encargan de la producción de melanina. Los  rayos UV-A hacen que la melanina reaccione con el oxígeno de la sangre, generando el clásico moreno de verano. Los rayos UV-C  no impactan en nuestra piel, dado que son filtrados totalmente por la atmósfera.

¿Cómo mantener el bronceado el máximo de tiempo posible?

#1 ¡Aplicar, aplicar, aplicar!

Para poder mantener el bronceado tanto tiempo como sea posible, debes aportar suficiente hidratación a tu piel. De este modo se ralentiza el proceso natural de renovación de la piel y mantendrás un atractivo moreno durante más tiempo.

El FRESH after sun & tan booster es un cuidado hidratante calmante para después de tomar el sol, que prolonga el bronceado de la mano de un extracto del alga Porphyridium cruentum. La crema se absorbe rápidamente, produciendo una sensación agradable en la piel. El FRESH after sun & tan booster también se puede utilizar durante todo el año como leche corporal ligera y suavemente bronceadora.

#2 Ducha caliente

Las duchas demasiado calientes y excesivamente largas secan la piel y modifican el pH. La consecuencia es una pérdida rápida de pigmentación y, por lo tanto, una piel más pálida. Suena a quitarte el bronceado con lejía… Pero tampoco es eso. Ducharte con agua demasiado caliente seca la piel y hace que las escamas bronceadas se desprendan más deprisa, sacando a relucir la nueva piel sin broncear. Por este motivo, el agua de la ducha debe estar templada. Si deseas reactivar la circulación, te recomendamos una ducha escocesa.

Los residuos de crema solar y el sudor se eliminan fácilmente lavándolos con FRESH soap o FRESH body wash. El FRESH soap elaborado a mano crea una espuma tratante y limpiadora al usarse. El aceite de comino negro tiene un efecto armonizador y mejora la calidad de la piel, reafirmando su estructura. Los aceites contribuyen a mantener la piel hidratada, creando una capa protectora y fortaleciendo la barrera dérmica, lo que impide que el agua se evapore. El jugo de aloe vera hidrata. El aceite de almendra reengrasa y proporciona un aporte óptimo de vitaminas a la piel. Después de la ducha, la piel cuidada por el sol no debe secarse frotándola firmemente, sino con toques suaves.

#3 Exfoliación delicada

No está del todo claro si las exfoliaciones contribuyen a prolongar el bronceado. Lo que sí es seguro es que debe procederse a la exfoliación antes de tomar el sol: así, tu piel estará preparada óptimamente para un bronceado uniforme. Debe prestarse atención a las zonas más ásperas, como codos, talones y manos. Al eliminar previamente las escamas, los rayos solares pueden penetrar con más facilidad en las partículas de la piel. Es mejor no exfoliar la piel inmediatamente después de tomar el sol, pues podría causar irritaciones.

El FRESH scrub libera la piel de células muertas, acelerando la renovación celular. Las partículas exfoliantes naturales estimulan la circulación sanguínea de la piel, dándole de nuevo un aspecto radiante y rosáceo. Totalmente sin microplásticos.